Descubre en el artículo de hoy todo lo que tienes que saber sobre los nuevos
discos duros SSD que podrán reemplazar a los
discos duros tradicionales HDD.
Te explicamos todo lo necesario para que a la hora de hacerte con un disco duro de este tipo tengas en cuenta los puntos más importantes.
Pero empecemos por el principio.
¿QUÉ SON LOS DISCOS SSD?
Por sus siglas en inglés (
Solid-state drive) significa algo similar a disco de estado sólido, en español, es un dispositivo de almacenamiento (similares a las
memorias USB, lápices de memoria, etc.) pero que en este caso utilizan un conjunto de circuitos eléctricos integrados en dicho dispositivo lo que hace que
almacenen memoria de forma constante.
Para entender este concepto bien quizá os suene más el término tradicional “
Disco Duro” (que sus siglas en inglés son
HDD = Hard Disk Drive) que es el dispositivo de almacenamiento del que dispone cualquier ordenador, que no es más que una especie de disco metálico (de ahí lo de Duro) con una capa magnética que por sus características almacena datos (música, películas, informes, etc.).
Estos datos “no se van” del ordenador por mucho que lo apaguemos, al igual que sucede con aquellos datos que vienen ya almacenados en el
sistema operativo de nuestros ordenadores.
Entendido este concepto de “Disco Duro” podemos entender perfectamente el del disco SSD, que posee prácticamente las mismas características que el HDD o disco duro tradicional, pero
en lugar de almacenar los datos en una capa magnética como el HDD lo que hace es almacenarlos en chips de
memoria flash (llamadas
Memorias NAND), de tal forma que los datos almacenados pueden conservarse de forma constante, es decir, aunque no haya ningún tipo de energía que los alimente.
Esta memoria flash es mucho más fiable y rápida que la que ofrecen los discos duros tradicionales, y como no, son más caros.
En resumen, los discos SSD
son una mezcla entre los discos duros que ya conocemos y las memorias flash externas (pendrives, lápices de memoria, memorias USB o como quieras llamarlas), pero los SSD están diseñados para permanecer en el interior de nuestros ordenadores y físicamente se parecen a los discos duros tradicionales.
Que estén diseñados físicamente como los discos duros permite que éstos puedan ser reemplazados por los discos SSD.
Veamos una imagen para conocer por dentro los
discos SSD vs HDD:
¿CUÁLES SON LAS VENTAJAS DE LOS DISCOS SSD?
Fundamentalmente
las ventajas de los discos SSD son 3:
1.
Son mucho más fiables. El material del que están hechos los discos duros tradicionales es mucho más frágil y muchas veces con movimientos no demasiado bruscos podemos provocar que nuestros discos duros sean ilegibles y perdamos la información almacenada. Los discos SSD como almacenan toda la información en chips de memoria flash existe menos componentes que puedan moverse por golpes.
2. Utilizan o
requieren mucha menos energía, un factor muy importante sobre todo para ordenadores portátiles.
3. El acceso a sus datos es
mucho más rápido, ya que estos discos no giran como los discos duros para leer sus datos, el acceso la información que poseen es casi inmediato.
PRECIOS Y CARACTERISTICAS DE LOS DISCOS SSD
Os mencionaremos a continuación algunas
marcas y precios que podemos encontrar en el mercado así como la capacidad de dichos discos SSD
DISCO DURO SSD SANDISK – 256 GB = 149 €
DISCO DURO SSD SANDISK – 128 GB = 80 €
DISCO DURO SSD SANDISK – 64 GB = 49 €
DISCO DURO SSD SAMSUNG – 250 GB = 169 €
DISCO DURO SSD KINGSTON – 120 GB = 77 €
Bueno, en realidad, como podemos ver los
precios varían según la capacidad del disco duro y de la marca, pero podemos encontrárnoslos
desde 50 € hasta 200 €.
Aquí puedes ver 3 de los discos duros ssd mejor valorados por los usuarios de Amazon y de diferentes capacidades:
CONSEJOS SOBRE DISCOS DUROS SSD
Antes de hacernos con uno de estos discos es conveniente saber qué queremos y para qué.
Según cada uno preferiremos invertir en una de sus ventajas o en todas, aunque aún sean caros estos discos, si no tenemos prisa, quizá podamos esperar a que bajen los precios.
Actualmente, los discos que podemos encontrarnos en el mercado (SSD) serán
desde 64 GB más de 1 TB (terabyte) de capacidad, por lo que si necesitamos mayor capacidad, de momento estamos un poco limitados.
Si queremos reemplazar nuestro disco duro por un disco SSD no nos alarmemos ya que el proceso es muy sencillo. Lo que tenemos que tener en cuenta es qué formato tiene nuestro disco duro y comprar el SSD equivalente. Por lo general están comercializándolos con
formato 2,5” pero muchos fabricantes ya consideran un kit de actualización para que nos sirvan tanto en portátiles como en ordenadores de sobremesa. Tendremos que tener en cuenta también la interfaz de conexión del disco duro y si lo queremos instalar en un portátil o en un PC ya que es diferente. No obstante, cualquier tienda que venda estos discos dispone de personal cualificado para ayudarte al respecto, pero te comentamos lo básico para que lo tengas en cuenta.
Otro factor importante es la marca, dependiendo del fabricante podemos encontrarnos discos SSD muy variados. Nosotros recomendamos las marcas
Sandisk y
Kingston, y también
Samsung.
Por último, y no menos importante, es conveniente
fijarse en el “controlador” que venga de serie en nuestro SSD. Lo que hace este controlador es indicarle a los chips de memoria flash dónde almacenar los datos y cómo leerlos. De esta forma, si tenemos un controlador potente como los de SandForce, Intel o Samsung evitaremos que la memoria flash de nuestros discos SSD se gaste más lentamente y corrija errores de forma más eficaz, así nuestro disco nos durará mucho más.
CONCLUSIÓN
Reemplazar imanes (disco duro tradicional o HDD) por láseres (disco duro SSD) suena prometedor por todas las ventajas que presenta y cada vez se están haciendo más y más populares.
Los imanes son más lentos que los láseres (flashes) y como la velocidad de ejecución está por encima de todo en estos días, quizá sea el principal factor que haga que estos discos SSD acaben despegando por completo y ya hoy en día sean los más utilizados.
Ahora te dejamos una comparativa de los 2 tipos de discos duros utilizados en los ordenadores.
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