Los Transductores, y más concretamente los transductores de presión, se
pueden utilizar para muchas aplicaciones diferentes en la industria; de hecho, son tan diversas que las aplicaciones son casi
infinitas.
Los transductores son elementos que pueden convertir las magnitudes físicas
captadas (temperatura, posición, peso, deformación, par de fuerza,
velocidad…) en magnitudes eléctrica, de tal forma que el sistema pueda
entenderlas.
En resumen, un transductor es un dispositivo capaz de transformar
una magnitud física en una magnitud eléctrica.
El sensor o sonda detecta los cambios físicos que ocurren en el entorno
donde se encuentra.
Un termómetro detecta los cambios de temperatura.
El transductor o captador convierte la cantidad de la magnitud física en
otra señal diferente, que en nuestro caso será una señal eléctrica.
Un transductor suele llevar incorporado un sensor, el sensor detecta/lee la
magnitud o lo que ha variado y el transductor la convierte en la señal
eléctrica elegida.
Es un transductor que convierte una presión en una señal eléctrica
analógica.
El sensor de este tipo de transductores lógicamente será un sensor que
detecte la presión del medio donde se encuentre el transductor.
Un transductor de presión consta de un elemento sensible a la presión para
determinar la presión que actúa realmente sobre el sensor y algunos
componentes que convierten esta información en una señal de salida.
La señal de salida del transductor suele ser una corriente de 4 a 20 mA o un
voltaje de 0 a 10 V.
Recordar que la presión se define como la fuerza aplicada
por un líquido o un gas a una superficie y generalmente se mide en unidades
de fuerza por unidad de superficie.
Las unidades comunes son Pascal (Pa), Bar (bar), Newton por metro cuadrado (N/m2) o
el psi (libras por
pulgada cuadrada).
Existen varias tecnologías que utilizan los transductores de presión para
obtener resultados precisos y que precisamente son los que hacen que existan
varios tipos.
- Transductores de Presión basados en Galgas Extensiométricas:
utilizan un elemento sensible a la presión con galgas Extensiométricas
metálicas (DMS) pegadas o DMS de película delgada rociada.
Las galgas extensiométricas son sensores cuya resistencia varía con la
fuerza aplicada.
Estos sensores convierten la fuerza, presión, tensión, peso, etc., en un
cambio de la resistencia eléctrica el cual puede ser medido.
Los sensores puede ser una membrana o, en el caso de galgas extensiométricas
metálicas, también se pueden utilizar cuerpos de medición cilíndricos.
Las principales ventajas de esta estructura cilíndrica monolítica son una
mayor rigidez y la capacidad de medir las presiones más altas de hasta
15.000 bar.
La conexión eléctrica generalmente se realiza a través de un circuito puente
de Wheatstone y permite una buena amplificación de la señal y resultados de
medición precisos y uniformes.
- Transductores de Presión Capacitivos: utilizan una
cavidad para la presión y un diafragma para crear un condensador variable.
Cuando se aplica presión, la membrana se deforma y en consecuencia la
capacidad varía.
Este cambio de capacidad puede medirse eléctricamente y luego relacionarse
con la variación de la presión.
Estos sensores están limitados a presiones bajas de alrededor de 40 bar.
- Transductores de Presión Piezorresistivos: constan de una
membrana, en su mayoría de silicona, con galgas extensiométricas integradas
(DMS), que miden la expansión causada por la aplicación de presión.
Estos medidores de tensión generalmente se conectan en un circuito de puente
de Wheatstone para reducir la sensibilidad y aumentar la señal de salida.
Debido a los materiales utilizados, la presión se limita a unos 1.000 bar.
- Transductores de Presión de Resonancia: A diferencia de
las tecnologías mencionadas anteriormente, todas las cuales utilizan la
desviación de un cuerpo de medición, los transductores de presión de
resonancia usan los cambios en la frecuencia de resonancia en un elemento de
medición para medir la tensión mecánica causada por la aplicación de
presión.
Dependiendo del diseño de estos sensores, el elemento de resonancia puede
entrar en contacto con el medio, dependiendo la frecuencia de resonancia de
la densidad del medio.
A veces, estos sensores también son sensibles a golpes o vibraciones.
- Otros transductores de presión que tampoco usan un prisma
de medición pueden ser sensores térmicos o de ionización que usan cambios en
la conductividad térmica causados por cambios de densidad en el flujo de
partículas cargadas para medir la presurización.
Los diferentes tipos de presión son, por ejemplo, presión absoluta, presión
positiva, presión relativa (manómetro sellado) y presión diferencial.
- Los Transductores de presión absoluta miden la presión
relativa a una presión de referencia, que normalmente suele tomar como
referencia el vacío.
Un Transductor de sobrepresión, o sensor de presión relativa, mide la
presión relativa a la presión atmosférica predominante en ese momento.
- Los Transductores de manómetro sellados funcionan como
sensores de presión positiva, pero miden la presión relativa a una presión
fija en lugar de la presión atmosférica predominante.
- Los Transductores de presión diferencial se utilizan para
medir una diferencia de presión, es decir, para medir caídas de presión,
niveles de llenado y caudales.
La ventaja de un transductor de presión absoluta es que
siempre se mide en relación con la misma presión de referencia (el vacío) y,
por lo tanto, los cambios en la presión atmosférica no tienen ninguna
influencia y los cambios en la temperatura solo tienen una influencia menor.
Se utilizan para informar al personal que la presión ha aumentado o
disminuido por encima o más allá de un cierto límite por razones de
seguridad.
A diferencia de los interruptores de presión, los transductores de presión
proporcionarán información sobre la presión real del sistema.
Esto los hace adecuados para aplicaciones complejas en las que es
necesario controlar la presión exacta.
Se pueden colocar en todas las aplicaciones que requieran una medición de
presión, y con una pantalla digital integrada, se puede usar un
transductor para medir la presión hidráulica o neumática principal
justo después de una bomba o en un subcircuito donde la presión puede ser
diferente.
Muy utilizados en los sistemas aires comprimidos y refrigeración, en
sistemas que existan filtros (presión antes y después del
filtro) y en las calderas de calefacción (gas,
biomasa, etc.).
Estas son algunas más de las aplicaciones concretas en las que se pueden
utilizar transductores de Presión: