El mantenimiento de una
instalación fotovoltaica es tan importante como el
control periódico del rendimiento.
De lo contrario,
los fallos y la pérdida de rendimiento de
las placas pueden pasar desapercibidos durante años y
pueden acabar
con los beneficios económicos que nos proporciona la instalación.
De hecho, tanto
las inspecciones periódicas por parte de los
propietarios como el mantenimiento por parte de una empresa especializada
son importantes, por varias razones:
- Si los daños no se detectan, en casos extremos, la instalación
fotovoltaica no ofrecerá un rendimiento óptimo durante años.
Esto puede significar que, en última instancia, el sistema fotovoltaico no
merezca la pena económicamente.
- Algunos daños, como los causados por rayos inadvertidos, son difíciles
de detectar si no hacemos un mantenimiento períodico.
Incluso en determinadas circunstancias, puede crear un riesgo potencial de
incendio.
- Ciertos daños se pueden cubrir y
asegurar mediante un seguro
fotovoltaico, pero muchas compañías de especifican el mantenimiento
regular que debe llevarse la instalación y si se producen daños por falta de
este mantenimiento preventivo puede dar lugar a disputas a la hora de cobrar
los daños producidos.
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todo sobre las instalacions fotovoltaicas:
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Aunque hablaremos del mantenimiento de las plantas fotovoltaicas, empecemos
por lo principal.
Limpieza de los Placas Solares
En principio,
tú mismo puedes limpiar los módulos solares
utilizando
agua limpia y una esponja suave o un cepillo
para vidrio.
El agua del grifo es una opción si tiene un bajo contenido de cal; el agua
desmineralizada y/o el agua de lluvia es más adecuada.
La esponja y el cepillo
no deben rayar el cristal y no se debe
utilizar productos de limpieza fuertes o cáusticos.
Sin embargo, un jabón suave no hará ningún daño a la hora de limpiar tus
placas solares.
Importante:
Sólo debes limpiar las
placas
solares tú mismo si es seguro
hacerlo, por ejemplo, si el sistema está en el suelo o instalado en
un tejado plano no hay problema, pero
OJO, limpiar desde una
escalera es muy peligroso para los profanos sin protección
profesional.
También hay que tener en cuenta que el sistema puede dañarse, generando
riesgo de descarga eléctrica.
¿Cuándo es mejor realizar el Mantenimiento?
El momento adecuado para el mantenimiento regular de una instalación
fotovoltaica es antes del inicio de la temporada de sol, es decir,
al final del invierno.
Esto permite a una empresa especializada identificar errores antes de que
tengan un impacto importante en las ganancias.
El mantenimiento
también puede ser necesario después de eventos
especiales, por ejemplo,
después de una tormenta.
Otro "evento especial" puede ser
una fuerte lluvia, que
aunque a primera vista elimina toda la suciedad de un sistema fotovoltaico y
puede ser bueno, desafortunadamente, despues de la lluvia cualquier cosa
puede quedar tirada o incluso atascada sobre las placas y producir un
mini-sombreado, con una notable pérdida de rendimiento como resultado.
Hojas y palos son las cosas más comunes que caen sobre las placas después de
la lluvia.
Después de una fuerte lluvia se recomienda una limpieza manual o mecánica
del sistema.
Si se observa alguna anomalía deberá registrarse en el libro de
mantenimiento para proceder a su reparación.
¿Cómo debe ser el
Mantenimiento?
Un proceso de mantenimiento correcto debe estar formado por
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procedimientos que actúan de forma complementaria:
-
Plan de vigilancia: que consiste en observar los
diferentes elementos de la instalación para comprobar su correcto estado y
funcionamiento.
Algunas se realizarán en el lugar de la instalación y otras pueden hacerse
en remoto mediante la monitorización de los valores de la tensión,
intensidad, potencia y energía.
-
Mantenimiento Preventivo: tiene una función preventiva
por lo que la actuación o sustitución sobre los elementos se realiza
mientras están funcionando correctamente.
Este tipo de mantenimiento debe realizarse por personal cualificado.
-
Mantenimiento Correctivo: se lleva a cabo para reparar
las averías o los daños ya causados.
También debe de realizarse por personal cualificado.
En general en cualquier instalación, incluidas las fotovoltaicas se puede
distinguir entre tres tipos de mantenimiento:
El mantenimiento correctivo implica reparar el sistema cuando se recibe un
mensaje de error.
El mantenimiento preventivo tiene la ventaja de que el mantenimiento no sólo
se realiza en caso de problema, sino que se realiza periódicamente para
garantizar el funcionamiento óptimo del sistema.
Esto evita averías y por tanto ahorra costes.
Estos 2 ya los vimos en el plan anterior, pero
cada día más se está
implantando el llamado mantenimiento predictivo en las plantas
fotovoltaicas.
- El mantenimiento predictivo: utiliza inteligencia
artificial, algoritmos de aprendizaje automático y datos de monitoreo
extensos en tiempo real para generar un modelo preciso de las operaciones de
la planta en condiciones estándar.
Con este modelo basado en datos, los algoritmos avanzados de modelado
predictivo
pueden pronosticar posibles eventos futuros, lo
que permite anticipar y optimizar de manera proactiva las acciones
preventivas y correctivas.
En resumen, el mantenimiento predictivo permite a los técnicos abordar
fallas e ineficiencias antes de que ocurran.
¿Qué debe revisarse?
Ya vimos lo importante que es la limpieza de los panales fotovoltaicos, pero
el mantenimiento o inspección periódica afecta también a los siguientes
componentes:
- Los
Paneles solares
- El Sistema de montaje
-
El cableado
- El o los
inversores
- El Contador, si es tuyo
- Almacenamiento de energía (
baterías), si está disponible
Además debe revisarse:
- La eliminación de suciedad.
- La prueba de medidores y cajas de distribución, conexiones de enchufes,
inversores, etc.
- Comprobar los defectos técnicos.
- Inspección de daños visibles, por ejemplo, debido a mordeduras de animales
o daños climáticos a los módulos o cables.
- Comprobar la fijación al tejado o anclajes del tejado
- La instalación de software o actualizaciones del sistema.
- Comprobar cualquier dispositivo de almacenamiento de energía existente.
Frecuencia del Mantenimiento
En general, los sistemas fotovoltaicos
se consideran de bajo
mantenimiento, pero es recomendable que este mantenimiento sea
periódico.
El mantenimiento
no es obligatorio por ley y, por lo tanto,
no existen requisitos legales sobre la frecuencia con la que se debe
realizar el mantenimiento del sistema fotovoltaico.
Se suele recomendar
un intervalo de mantenimiento de 2 años
por parte de una empresa especializada para poder solucionar los fallos lo
antes posible.
Durante este mantenimiento,
la instalación fotovoltaica debe ser
examinada minuciosamente.
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